Crónica del Cadete B

Construcciones L-Z 3 - 3 Móstoles 2008 F.S. "B"

"Un gol en contra en el último segundo complica el pase a la fase de campeones"

Este partido era muy importante para las aspiraciones de clasificación del equipo a la fase de campeones y al igual que en el partido anterior se nos fueron dos puntos vitales, lo que hace más complicado el pase.

El partido comenzó con el marcador a favor gracias a la paciencia en nuestro juego ofensivo y a una constante presión al rival impidiendo que realizaran un juego cómodo. El primer gol llegó a cargo de Pablo que tras una jugada de elaboración bien trenzada tuvo su culminación tras un disparo lejano aparentemente sin peligro pero dado que el balón pasó entre varias piernas hizo que el portero no tuviera capacidad de reacción.

Tras el gol comenzamos a tener mayor claridad y posesión de balón creando alguna que otra ocasión ventajosa pero no hubo acierto...hasta que una paralela en banda izquierda magistralmente ejecutada por Cristian tras un disparo cruzado haciendo que el esférico se colara en el fondo de la red. El rival tampoco renunció al ataque pero nuestra defensa abortaba cualquier situación de finalización con rápidos repliegues y apoyos, además de las intervenciones realizadas por nuestro portero Adrian procedente del equipo infantil y debutante hoy hicieron que nuestra portería terminara a cero al final del primer tiempo.

En la reanudación del encuentro, ya suponíamos que el rival saldría arriesgando y dando todo lo que pudiera pero no fue suficiente, cuando un disparo lejano casi calcado al nuestro en el primer tiempo puso el 1-2 en el marcador. A partir de ahí el partido se convirtió en un correcalles con continuas transiciones que nada nos beneficiaba hasta que se produjo un despiste en el marcaje en la 2ª línea defensiva y se produjo el empate. Tras un tiempo muerto supimos reaccionar y a falta de 6 minutos para el final y en una jugada individual de Pablo volvimos a tomar ventaja en el marcador.

Nos pusimos el mono en defensa y aguantamos las acometidas ofensivas del rival hasta que en el último segundo y tras una jugada desafortunada en un saque de meta nuestro "sin entendimiento" hizo que el balón casi sin ángulo se colara en la "portería de la desolación".

Eusebio, el míster, se expresaba en estos términos al final del encuentro: “Se me ocurren varias cosas que decir, pero creo que todos sabemos que hasta que el árbitro no pita el final no se puede dar por ganado un partido y menos en un deporte tan espectacular. Espero que esto sirva de lección y que la próxima vez, si me permitís utilizar este símil con el boxeo...!!Nuestros púgiles no bajen la guardia!!"